Julio Verne
Los límites de la imaginación

En Espacio Fundación Telefónica, el Capitán Nemo vuelve a surcar los mares a los mandos del Nautilus, Miguel Strogoff cabalga de nuevo por la estepa rusa y Phileas Fogg sigue empeñado en llegar al Reform Club en 80 días.

Julio Verne

Hasta el 21 de febrero se puede visitar la espectacular exposición dedicada al mundo de Julio Verne, que han comisariado Miguel Ángel Delgado y María Santoyo. Una ocasión para recuperar la infancia perdida y conocer mejor al escritor que puso a prueba los “límites de la imaginación”, frase que se ha tomado como lema para la exposición y que hace referencia al más famoso dicho de Verne: “Todo lo que un hombre puede imaginar, otro puede hacerlo realidad”.

La muestra parte de toda la iconografía asociada a Julio Verne para sumergir al visitante en el tiempo en que vivió el escritor. En palabras de Miguel Ángel Delgado “Julio Verne recogió el espíritu de una época que creía en el progreso del hombre, en su capacidad para superar todos los retos y los límites y conquistar las últimas fronteras”.


La muestra realiza un homenaje a viajeros, exploradores, trotamundos, aventureros, periodistas, fotógrafos, cineastas… que encarnan a la perfección el espíritu de una época empeñada en romper los límites. Son personas reales, que existieron realmente, pero que parecen personajes sacados de las novelas de Verne, como Ernest Shackleton, uno de los grandes héroes de la Antártida. “Si lees su biografía” –dice Miguel A. Delgado– “te das cuenta de que es igual que el capitán Hatteras sólo que obsesionado por ir al sur en lugar de ir al norte”.

El visitante se va a sorprender con otros personajes menos conocidos pero igual de fascinantes. “Como el asturiano Jesús Fernández Duro, “otro inspirado por las novelas de Verne, que en 1902 fue la primera persona en cruzar los Pirineos en globo, una verdadera hazaña que le convirtió en un héroe en la prensa de España y Francia”. En la exposición se exhibe la Copa de los Pirineos que recibió por completar tal hazaña.

La muestra refleja la enorme influencia que tuvo Julio Verne para sus contemporáneos y recoge el trabajo de artistas que, inspirados por el escritor, imaginaron en el siglo XIX, como sería el año 2000.

Por supuesto hay un apartado dedicado a la Luna, iIlustraciones de los personajes de Verne, y auténticas joya bibliográficas como la primera edición mundial de “Veinte mil leguas de viaje submarino” que se publicó, curiosamente, en España antes que en ningún otro país. Y una reproducción de la Biblioteca de Julio Verne

Julio Verne (Exposición) - Fotos de la Luna

La muestra cuenta con material cedido por 14 prestatarios de ámbito nacional, entre ellos el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología (MUNCYT), la Biblioteca Nacional y el Museo Naval, y dos de ámbito internacional. Entre este material se encuentran aparatos científicos de la época, mencionados en las novelas de Verne, y una carta esférica de 1870 que se exhibe por primera vez “en la que aparecen reflejados todas esas zonas del globo que estaban por conocerse y a las que llegaron los personajes de Verne por primera vez antes de que llegaran los exploradores reales y en muchos casos con una capacidad de acierto en las hipótesis de Verne, bastante sorprendente” explica Miguel A. Delgado.

La exposición incluye más de 30 fotografías provenientes de la colección de Clark Worswick, uno de los mayores coleccionistas de fotografía antigua de todo el mundo. Algunas se muestran por primera vez y en ellas el visitante puede seguir el viaje de Phileas Fogg o conocer a Nellie Bly, la periodista norteamericana que entre 1889 y 1890 dio la vuelta al mundo en sólo 72 días.

Make: Lanovia Model: C-550 Digitised by NZMS for the Antarctic Heritage Trust from original negatives. Copyright Antarctic Heritage Trust

Make: Lanovia Model: C-550 Digitised by NZMS for the Antarctic Heritage Trust from original negatives. Copyright Antarctic Heritage Trust

Se pueden ver también 10 fotografías tomadas durante la “Expedición Imperial Transatlántica” de Shackleton, que tuvo lugar entre 1914 y 1917. Los negativos de estas fotografías se encontraron en diciembre de 2013 congelados en una cabaña que había pertenecido a la expedición de Scott  en la Antártida. Han sido restaurados durante un año y se muestran al público por primera vez.

La muestra tiene los mismos comisarios que ya tuvo la exposición sobre Nikola Tesla y está concebida, en cierto modo, como su continuación, explica Miguel Angel Delgado, ya que como aquella, es el retrato de toda una época. La exposición de Nikola Tesla fue uno de los grandes éxitos del año pasado, con más de 200.000 visitas, la tercera más vista en todo el país.

Al igual que en la exposición sobre Nikola Tesla, en esta ocasión la parte audiovisual tiene gran importancia y está concebida para sumergir aún más al visitante en la atmósfera de la obra de Julio Verne.


La exposición se podrá visitar en Espacio Fundación Telefónica hasta el 21 de febrero de 2016. En torno a la exposición se han organizado talleres, visitas escolares y visitas comentadas gratuitas. Se pueden consultar los horarios en la web de Espacio Fundación Telefónica.

Exposición Julio Verne - Los límites de la imaginación

Diciembre

Diciembre es el mes que pone punto final al año. Poco queda ya, más que celebrar las Navidades con unas cuantas comilonas. Porque Diciembre es sobre todo (para los países occidentales) el mes de los excesos festivos. Da la sensación de que nos hemos ganado un respiro y los excesos nos sirven de catarsis. Que ya llegará después enero con las rebajas (en todos los sentidos) .

Además del final del año, Diciembre nos trae el invierno. Es el mes con menos horas de luz diurna en el hemisferio norte y con más en el hemisferio sur .

Es sobre todo y ante todo el mes de la Navidad. Pero no sólo de Navidad vive Diciembre, que en ocasiones nos ha venido con más disgustos que fiestas. En el año 1347 fue este mes el que trajo la temida peste a Europa.

Austerlitz-baron-Pascal.jpg

El día 2 de diciembre de 1805 fue bueno según para quién. Lo fue para Napoleón, que obtuvo uno de sus mayores logros militares al vencer en la batalla de Austerlitz. No lo fue tanto para la coalición ruso-austriaca a la que se enfrentaba.

En un ámbito mucho más local y un par de siglos antes, otro 2 de diciembre (el de 1617) se iniciaron en Madrid las obras de la Plaza Mayor.

http://www.nasa.gov/content/forty-years-ago-pioneer-10-closest-approach-to-jupiter

Fue un mes de Diciembre cuando conocimos mejor a uno de nuestros vecinos. La sonda Pioneer 10 nos envió las primeras imágenes de Júpiter el 4 de diciembre de 1973.

Sir Isaac Newton (1643-1727)

En el terreno científico Diciembre tiene también, por supuesto, hitos destacables. Los primeros Premios Nobel se otorgaron en diciembre de 1901. Mucho antes, el 25 de diciembre de 1695 nació la que para muchos es la mente más brillante de todos los tiempos, la de Isaac Newton.

Casi dos mil años antes, el 7 de diciembre del 43 a.C. fallecía otro de los grandes hombres que de vez en cuando nos da la Historia: Marco Tulio Cicerón, jurista, filósofo y escritor romano, que ha pasado a la posteridad, entre otras cosas, por sus grandes dotes como orador y por su oposición a la dictadura de Julio César.

El mismo día que Isaac Newton pero de 1899 nació uno de los iconos del cine negro, Humphrey Bogart.

Humphrey Bogart in Casablanca trailer.jpgY Diciembre es, finalmente, el mes de la esperanza. Al terminar el año intentamos dejar atrás los malos momentos y durante un instante confiamos en que lo que viene será mejor. Y es el mes de las promesas. Nos prometemos cambiar todas esas actitudes, manías o hábitos que o no nos gustan o nos gustan pero sabemos que no son buenas.

Ya llegará enero para devolvernos los pies a la tierra.


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Ada Byron Lovelace, la encantadora de números

El primer programador de la historia de la informática fue una mujer. Una mujer que vivió y murió en el siglo XIX. Augusta Ada Byron murió hace hoy exactamente 163 años (10 de diciembre de 1815 – 27 de noviembre de 1852 ) sin llegar a cumplir 37 años.

Ada Lovelace.jpgEra hija del célebre poeta romántico Lord Byron y de Anna Isabella Noel Byron, de soltera Anna Isabella Milbanke. Sus padres se separaron dos meses después de su nacimiento y la niña se quedó con su madre. Annabella había quedado muy escarmentada de su relación con lord Byron y no quería nada relacionado con el mundo de las letras, que consideraba muy dañino, así que encaminó la educación de su hija hacia el lado opuesto, las matemáticas.

Ada recibió una instrucción en matemáticas muy severa y estricta. Resultó que tenía un talento natural para los números y llegó a dominar tan bien la disciplina que años más tarde sería conocida como “la encantadora de números”.

Cuando Ada tenía 17 años conoció a Charles Babbage, con el que trabajó para desarrollar la “máquina diferencial”, que se considera antecedente del primer ordenador. Para esta máquina, Ada creó el primer programa de la historia, el primer algoritmo, el primer lenguaje de programación. Incluso se llamó a sí misma “analista”, un concepto totalmente inusitado y avanzado para la época.

Ada Lovelace tuvo intuición para prever el potencial de las máquinas. Desarrolló conceptos que hoy en día se utilizan en informática, como bucle o subrutina. Y llegó a sugerir la utilización de algo que después nos resultaría muy familiar, las tarjetas perforadas .

En 1843 Ada publicó sus notas sobre la máquina analítica, pero las firmó con solamente sus iniciales porque no era época para que una mujer escribiera tales cosas. En su momento se pensó que ella era simplemente la transcriptora de Babagge, aunque en la actualidad se sospecha que es ella quien realmente está detrás de la máquina analítica y no Babagge.

De hecho en el año 1953, estas notas fueron publicadas con el nombre completo de Ada y se reconocieron como una descripción del software de la máquina analítica.

Babbage nunca construyó su máquina, pero en 1991 el Museo de Ciencias de Londres, construyó una “máquina diferencial” basándose en sus dibujos y utilizando sólo técnicas disponibles en aquella época. La máquina funcionó sin problemas

Babbage Difference Engine.jpg

El 8 de julio de 1835, con 19 años, Ada se casó con William King, octavo barón de King, que después se convirtió en Conde de Lovelace, motivo por el cual ella ha pasado a la posteridad con el nombre de Ada Lovelace.

Ada nunca tuvo relación con su padre. Lord Byron se fue de Inglaterra apenas unos meses después de nacer ella y nunca regresó. Murió durante la Guerra de la Independencia griega en 1824, cuando la niña tenía ocho años. Sin embargo, Ada pidió ser enterrada a su muerte al lado de su padre en la Iglesia de Santa María Magdalena, en Hucknall, Nottingham. Y así se hizo.

Ada Lovelace murió de cáncer de útero el 27 de noviembre de 1852 . Una vida corta en tiempo pero larga en beneficios para posteriores generaciones.

Charles Babbage llegó a admirar y apreciar mucho su talento y, de hecho, fue él quien acuñó el apodo de «La encantadora de números». Pero Ada no tuvo en vida el reconocimiento social que merecía, no era posible en la sociedad victoriana que le tocó vivir.

El futuro sí reconoció su importancia. En 1979 el Departamento de Defensa de los Estados Unidos creó un lenguaje de programación basado en Pascal en honor de Ada Byron llamado lenguaje de programación Ada.

Y como suele ocurrir con los genios olvidados, internet pronto hizo suya la figura de esta genial mujer. Cada 14 de octubre blogs de todo el mundo se llenan de entradas sobre ella para celebrar el “Día de Ada Lovelace”, un día que nació en honor de las mujeres dedicadas a la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Fue instaurado a iniciativa de la periodista y escritora Suw Charman-Anderson.

Esther Rubio, doctora en Química y profesora de Física y Química, dedicó su TEDxTalk, en la edición de TEDxGranVía Women del 29 de mayo de 2015, a mostrar la contribución de Ada Lovelace en los orígenes de las tecnologías digitales.


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